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Formulario para apadrinar un Lugar de Interés Geológico

Apadrinar un Lugar de Interés Geológico es gratuito y muy sencillo. Si estás interesado sólo tienes que rellenar el siguiente formulario.


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Lugar de Interés Geológico que vas a apadrinar

DU083 - Cerro testigo del Teso del Viso (Bamba) Ver descripción LIG)

El Teso del Viso es un rasgo de la Geología zamorana cuyo interés radica en los aspectos estratigráficos y sedimentológicos que sus laderas ofrecen, en los yacimientos de vertebrados fósiles localizados en su entorno y en sus características geomorfológicas. Desde el punto de vista estratigráfico, en el Teso del Viso afloran materiales del Eoceno medio y del superior, el primero correspondiente a las limolitas de Entrala que se encuentran en su base, constituyendo las planicies que lo rodean, mientras que el segundo, que afloran a lo largo de su laderas hasta llegar a la cumbre, está representado por areniscas y conglomerados, las llamadas areniscas de Corrales, responsables del relieve positivo que el Teso del Viso ofrece en el paisaje circundante. Las areniscas de Corrales están formadas por una sucesión de ritmos detríticos de origen fluvial separados por superficies erosivas, con paleocanales y estratificación cruzada. En su parte inferior predominan las areniscas conglomeráticas de cuarzo y color blanco que hacia el techo pasan a areniscas de grano medio, mientras que hacia su parte superior se hacen frecuentes las pasadas de limos y arcillas entre areniscas de grano fino, e incluso costras calcáreas. Hacia el techo aparecen conglomerados de hasta 2 m de espesor estratificados con areniscas en capas de entre 4 y 10 m de potencia. En total, en el Teso del Viso, el espesor de estas areniscas y conglomerados alcanza los 75 m. Corresponden a un sistema fluvial entrelazado, en el cual se producirían desecaciones estacionales responsables de la formación de costras. Los canales de este sistema fluvial proceden del O y en la zona situada entre Sanzoles y Jambrina, se detectan antiguas llanura de inundación responsables de la sedimentación de limos y arcillas. Su edad es Eoceno medio. Desde el punto de vista geomorfológico, el Teso del Viso es un buen ejemplo de cerro testigo, o porción residual de un relieve tabular. Se trata de un cerro de contorno subcircular que destaca en una llanura suavemente ondulada desarrollada en las limolitas, cuyas laderas con fuertes pendientes labradas en las areniscas y conglomerados ascienden hasta llegar a una zona de escarpe más verticalizado, que una vez coronado da paso a la superficie horizontal que remata el relieve. Las laderas están surcadas por cárcavas y barrancos y sobre ellas aparecen depósitos de vertiente constituidos por grandes bloques desprendidos de la cornisa superior y de las capas más duras que dan resaltes secundarios en las laderas. Además, las excavaciones paleontológicas realizadas en las limolitas de la base del Teso del Viso han proporcionado numerosos ejemplares de Asiatosuchus sp., cocodrilo de hasta 6 m de longitud que habitó en los ríos y pantanos del Eoceno medio de esta zona.
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