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CI100 - Diques de lamprófidos y monzo-sienitas de El Herradón-San Bartolomé de Pinares Ver descripción LIG)

En las rocas plutónicas y metamórficas del Sistema Central, han intruido una serie de enjambres de diques alcalinos que presentan en general direcciones N-S. De entre las cinco áreas geográficas en las que aparecen (entorno del puerto del Pico-Villatoro, Sierra de la Paramera, Herradón-San Bartolomé de Pinares, Tornadizos-Bernuy Salinero y Hoyo de Pinares-Peguerinos), se han seleccionado como representativos del conjunto los diques de la zona de fractura de El Herradón-San Bartolomé de Pinares. En esta zona de fractura, de dirección N-S siguiendo la lineación El Herradón-Casillas, que afecta a los granitos adamellíticos del lugar, aparece un enjambre de diques de dos tipos litológicos diferentes: lamprófidos, por un lado, que afloran preferentemente el en sector norte del LIG, y pórfidos monzo-sieníticos, por otro, representados en la zona central y meridional del LIG. Los lamprófidos son un variado conjunto de rocas que se caracterizan por su textura porfídica y por la presencia de minerales máficos con elevados contenidos en volátiles (anfíbol, flogopita, etc.), tanto en forma de fenocristales como dentro de la matriz, y por la ausencia de fenocristales de feldespatos. Por la abundancia de anfíbol Ti-augita, olivino y biotita, y por la mayor presencia de plagioclasa que de ortosa, los lamprófidos de este LIG, que son alcalinos, se clasifican como camptonitas. Los diques no muestran una gran continuidad en superficie, truncándose frecuentemente, en distancias frecuentemente inferiores a un kilómetro, debido principalmente a fallas. Tanto los diques de lamprófidos como los de pórfidos monzo-sieníticos presentan en general direcciones próximas a la N-S, mostrándose subparalelos aunque a veces llegan a cortarse. Cuando esto ocurre se observa que son los diques de pórfidos monzo-sieníticos los que cortan a los de lamprófidos (Ubanell et al., 1984). La estrecha asociación entre los diques de lamprófidos y de pórfidos monzo-sieníticos, pone de manifiesto la posibilidad de que ambos tipos de diques alcalinos puedan estar emparentados genéticamente. Los diques de lamprófidos alcalinos, de composición básica a ultrabásica, se encuentran normalmente meteorizados en superficie (reconocibles sólo por la presencia de fragmentos redondeados de roca oscura o negra en el suelo) y los afloramientos frescos son poco frecuentes. En estos cortes frescos se puede observar que los diques son subverticales, con espesores comprendidos de hasta 3 m. Los contactos con la roca de caja son netos, con un pequeño borde de enfriamiento de espesor centimétrico con textura afanítica. Estos materiales presentan textura porfídica, distinguiéndose fenocristales negros de piroxeno, anfíbol o flogopita, englobados en una matriz oscura microcristalina. Se observa un marcado carácter ocelar, con numerosos glóbulos de color claro o rosáceo cuyo tamaño puede llegar a 1,5 cm y, en algunos afloramientos, abundantes enclaves, megacristales y xenocristales, de muy distintos tipos y tamaños. Según Orejana (2006), el origen de estas texturas ocelares y vesiculares parece encontrarse en fenómenos tardíos de inmiscibilidad líquida de fundidos silíceos (formándose los ocelos feldespáticos) y de segregación de fases ricas en volátiles (formándose los ocelos carbonáticos y vesículas con clorita). Los enclaves máficos y ultramáficos incluidos en los diques de lamprófidos suelen ser de pequeño tamaño y pueden dividirse en cuatro grupos (Orejana, 2006): enclaves alterados (tipo I), piroxenitas con espinela (tipo II), clinopiroxenitas hidratadas (tipo III) y hornblenditas (tipo IV). Aunque estos cuatro grupos de enclaves tienen génesis diferentes, se caracterizan por la ausencia de olivino y la abundancia de clinopiroxeno, por lo que no pueden considerarse xenolitos típicos de manto. Los megacristales y xenocristales de clinopiroxeno, anfíbol, plagioclasa y espinela presentes en los diques de lamprófidos poseen dos orígenes distintos, coincidentes con el de los enclaves de piroxenitas con espinela y el de los enclaves de hornblenditas. En cuanto a los diques más ácidos de pórfidos monzo-sieníticos que afloran en esta lineación estructural de El Herradón-Casillas, fueron descritos, entre otros, por Ubanell (1981) y Ubanell et al. (1984). Están también muy alterados y meteorizados en superficie, por lo que tampoco suelen dar lugar a buenos afloramientos en el campo, siendo los taludes de carretera o los caminos los lugares donde se les puede estudiar mejor. Su color es naranja rojizo a rojo, más o menos oscuro en función de la cantidad de minerales máficos presentes. De visu destacan fenocristales fundamentalmente de feldespato potásico, plagioclasa, anfíbol y biotita, en una matriz microcristalina. La potencia suele estar comprendido entre 4 y 6 m y su inclinación es subvertical. El contacto con la roca de caja es neto y está marcado por un borde de enfriamiento de unos dos centímetros de espesor compuesto por una masa criptocristalina (Orejana, 2006). En algunos diques se pueden encontrar amígdalas o geodas, de tamaño centimétrico, en las que se aprecia el crecimiento de cristales de carbonato y cuarzo hacia el interior. La presencia de abundantes geodas y glóbulos vacíos en el sector de San Bartolomé de Pinares es indicativa de un emplazamiento subvolcánico, muy próximo a la superficie. Los datos de edades obtenidos por Orejana (2006) y otros previos existentes en la literatura permiten datar los diques alcalinos básicos de lamprófidos y los más ácidos (pórfidos monzo-sieníticos) en el Pérmico Medio-Superior (250-264 Ma).
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