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CI046 - Formación Ollo de Sapo en bajo grado de metamorfismo, en el embalse de Valparaíso Ver descripción LIG)

La Formación “Ollo de Sapo” está típicamente constituida por gneises glandulares, con carácter porfídico debido a la abundancia de megacristales de feldespato potásico y la presencia de fenocristales de cuarzo de gran tamaño y de color azulado, por lo que Hernández Sampelayo (1922) bautizó estas rocas con el nombre de “Ollo de Sapo”, usando una expresión local derivada de la presencia de ojos de cuarzo de color azulado, dentro de una matriz esquistosa de color oscuro. De acuerdo con la interpretación más aceptada y compatible con las observaciones de campo, la Formación “Ollo de Sapo” proviene de un conjunto volcánico de carácter ácido, con lavas, tobas y rocas subvolcánicas que han sufrido un proceso metamórfico (Riemer, 1963, 1966; Martínez García, 1973; Navidad, 1978; Díez Montes, 2006). El segundo de estos autores consideró que existe, durante el depósito de las tobas, un cierto aporte detrítico. Esto, obviamente, no excluye un origen intrusivo para otros ortogneises glandulares distintos al “Ollo de Sapo”. La posición estratigráfica es siempre por debajo de los materiales del Ordovícico Inferior siliciclástico, y por encima de las series esquistosas o gneísicas con cuarcitas y carbonatos cuya edad puede abarcar desde el Cámbrico Inferior al Proterozoico Superior. Eso acota la edad del “Ollo de Sapo” entre el Cámbrico Inferior y el Ordovícico Inferior. Varias dataciones isotópicas señalan que la edad del “Ollo de Sapo” es Ordovícico Inferior (Díez Montes, 2006). En general, hay en la actualidad un consenso amplio sobre la existencia de un evento ígneo de carácter ácido, con actividad volcánica, subvolcánica y plutónica, en él transito del Cámbrico al Ordovícico. En este LIG puede observarse la “Fm Ollo de Sapo” en bajo grado metamórfico. Son rocas inequigranulares, porfídicas, cuyo tamaño de grano está marcado por los fenocristales de cuarzo, feldespato potásico y plagioclasa, estos últimos de color blanco, por lo que destacan respecto a la matriz, que tiene un color de gris oscuro a negro, con un tamaño de grano que varía desde muy fino a afanítico, y que engloba los fenocristales, así como agregados de biotita. De acuerdo con Díez Montes (2006), los cristales de feldespato potásico y plagioclasa presentan una distribución de tamaños bimodal, diferenciándose dos poblaciones que corresponden a fenocristales y a megacristales. Los primeros tienen un tamaño medio de 1‐2 cm de arista y los segundos un tamaño medio de 5‐7 cm de largo por 2‐4 cm de ancho, si bien pueden llegar alcanzar los 10 cm de largo. Tanto unos como otros suelen ser idiomorfos, hecho que se parecía muy bien cuando se encuentran sueltos en las zonas arenizadas, junto con la abundancia de maclas de Carlsbad. Una característica frecuente de las glándulas de feldespato potásico es la presencia de finas orlas de cristales de plagioclasa albítica que las recubren, definiendo una textura rapakivi. Son también comunes las inclusiones de biotita, que se disponen de forma paralela a los bordes de los megacristales (texturas Frasl). Otras veces se observa un zonado concéntrico en los megacristales, con límites netos entre las zonas. Los fenocristales de cuarzo muestran un tamaño de grano medio de 1 cm a 1,5 cm. Sus formas son redondeadas, pudiendo verse golfos de corrosión. En general, dentro de esta facies de bajo metamorfismo, estos fenocristales tienen un color azulado, que se debe a gran cantidad de inclusiones de agujas de rutilo (efecto Tyndall). Al observar en detalle la roca, se aprecian cristales de cuarzo con un tamaño menor (≈ 0,5 cm), que tienen un mayor idiomorfismo que los primeros y que pueden presentar caras cristalinas bien desarrolladas. Otra característica de los ortogneises glandulares de bajo grado es la presencia de un moteado de color negro, formado por agregados de pequeños cristales de biotita, con formas alargadas, algo elipsoidales, marcando una lineación paralela a la definida por las sombras de presión y a las fibras que se desarrollas en ellas
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