MAGNA 3.0-E. 1:50.000. MOLINA DE SEGURA (912)

81 depósitos cabe señalar que son más finos pues se alimentan de materiales que llevan los arro- yos, pero también de los depósitos de origen lateral procedente de las laderas. La ausencia de régimen torrencial en ellos, y una morfología suave de sus márgenes, es lo que marca la diferencia con las formaciones anteriores. Se les atribuye una edad Holoceno. También se han cartografiado algunos meandros abandonados. El de mayor tamaño es el que se encuentra al oeste de la localidad de Algaida, en la margen derecha del río Segura. Se reconocen, aparte de la depresión que los constituye, por su de naturaleza arcillosa, al me- nos a techo, y presentar tonos parduscos en contraste con los materiales más blanquecinos que los rodean. Contienen también arenas gravas y cantos, pero en menor cuantía. Aunque normalmente son inactivos, en periodos de grandes avenidas pueden sufrir encharcamientos temporales. Se consideran de edad Holoceno. Los conos de deyección con pendiente elevada son aquellos depósitos de pequeño tamaño, en forma de abanico, que se forman a la salida de arroyos y barrancos y desembocan en otros valles de mayor rango, donde la pendiente es menor. Allí, al perder energía, dejan sus depósi- tos acumulándose los de textura más grosera en la parte apical, mientras que los más finos se alejan produciendo una morfología característica. La litología, como siempre, depende de los materiales que arrastre en el camino, pero lo más fácil es encontrar cantos gravas y bloques de materiales carbonatados, a veces areniscosos, envueltos en una matriz arcilloso limosa. Son muy escasos y algunos de ellos pueden observarse en el curso alto del río Segura y en algunos tramos del río Mula. Se les ha atribuido una edad Holoceno por estar muy relacionados con las últimas fases del encajamiento fluvial. Existen también una serie de abanicos aluviales de gran tamaño, de pendiente muy plana, que aparecen orlando algunos relieves en el cuadrante noroeste de la Hoja, en la sierra de Ricote. En la actualidad se encuentran disectados por algunos fondos de valle y rambla y están muy trastocados por la mano del hombre. Se trata de depósitos areno-limosos con niveles lenticulares de gravas y algunas estratificaciones. A veces se pueden observar algunos canales con barras de gravas y cantos e incluso con grandes bloques en áreas próximas a los relie- ves. La litología es mayoritariamente carbonatada pues todos los materiales que conforman estos abanicos proceden de la sierra de Ricote, de esta misma naturaleza. La potencia media estimada es de 2-5m, pero pueden a veces superar los 6 m, con variaciones longitudinales. Existen dos niveles que se han asignado al Pleistoceno medio-superior, el más antiguo y al Pleistoceno superior, el más reciente. Las terrazas constituyen el universo más complejo en el conjunto de las formaciones de carác- ter fluvial y son los sistemas de los ríos Segura y Mula los que alcanzan un mayor desarrollo. El río Segura, como ya se ha señalado más arriba, desarrolla siete niveles de terrazas, algunos de carácter discontinuo, encajados, y con alturas que van desde los +80 m hasta los +5 m. Litológicamente están constituidos por un conjunto de gravas, cantos y bloques con una matriz arenosa y ligeramente cementados. Sus depósitos se corresponden con los antiguos fondos de valle de carácter torrencial, ofreciendo cierta similitud con los fondos de valle actuales. La litología de los cantos es mayoritariamente de naturaleza calcárea, aunque existen algunos fragmentos de rocas metamórficas, pero muy escasos. Sus facies son típicamente fluviales, es