MAGNA 3.0-E. 1:50.000. MOLINA DE SEGURA (912)

58 lo que, a priori, esta facies olistostrómica parece tener episodios de cronología más reciente que la descrita con anterioridad. 2.3.4. USD-III.- Unidad de Campos del Río. Mioceno superior 2.3.4.1. Conglomerados con cantos carbonatados (cg); areniscas (s); margas y calizas (cal) y yesos (35). Messiniense En discordancia erosiva y angular sobre la unidad anteriormente descrita de margas gris-azu- ladas (27), se encuentra una potente sucesión en cuyo registro sedimentario pueden distin- guirse fundamentalmente dos grupos de facies: turbidíticas y marinas de carácter somero, ordenadas de muro a techo en un ciclo de facies en situación regresiva. La cartografía detallada de los cuerpos detríticos permite evidenciar la existencia de, al menos, dos megasecuencias cuya arquitectura estratigráfica es muy parecida. El registro sedimentario de la primera megasecuencia abarcaría desde la discordancia basal hasta los conglomerados de La Albarda situados al NE de la Hoja o los conglomerados del Portichuelo-Cañada de los Peregrinos ubicados al este y suroeste del Embalse de Campos del Río (cg). En el sector del Portichuelo el tramo superior de esta megasecuencia son yesos masivos (y) de color gris oscu- ro que se depositan sobre los conglomerados o como cambio lateral. La segunda megasecuencia abarcaría desde el potente tramo de constitución eminentemente margosa que se desarrolla sobre los conglomerados reseñados hasta los conglomerados blan- cos y masivos (36) o los yesos masivos a microlaminados (37) . Ambas megasecuencias grano y estracrecientes constituyen un ciclo de facies de iguales características. Dentro de las facies que se agrupan bajo la denominación de turbidíticas, en las series reali- zadas, pueden identificarse las siguientes: Conglomerados de afinidad turbidítica (cg) . - Son numerosos los afloramientos de conglo- merados con entidad cartográfica que se intercalan a distintos niveles estratigráficos de esta unidad. En general se trata de cuerpos, con bases erosivas, constituidos por el apilamiento de secuencias grano y estratodecrecientes de conglomerados polimícticos en los que la fracción predominante es la de cantos de calizas bien redondeados, en paso a gravas y areniscas (lita- renitas) de grano grueso. Internamente se observa una disminución progresiva en el contenido de los clastos, “coarse-trail-grading”, a la vez que el tamaño de la matriz es asimismo menor apareciendo láminas de “traction carpet”. Las observaciones de campo muestran como estos cuerpos de conglomerados pasan lateralmente a las secuencias gradadas que se describen a continuación. Estos depósitos pueden interpretarse como el relleno de canales de espesores métricos a decamétricos y extensión lateral hectométrica tal como se han cartografiado. La pre- sencia de conglomerados y areniscas masivas correspondientes a las facies B1 (MUTTI, 1992), caracterizadas por su falta de organización interna, indicativa de que la corriente no ha sufrido salto hidráulico, y su organización en secuencias positivas, correspondientes al relleno de cana- les indican que el depósito tuvo lugar en zonas de canal del abanico externo, dentro del modelo de abanico siliclástico propuesto por MUTTI y RICCI LUCCHI 1972.