MAGNA 3.0-E. 1:50.000. MOLINA DE SEGURA (912)

20 El contacto inferior de estos materiales es la superficie del citado cabalgamiento en tanto que a techo se tienen en concordancia los depósitos carbonatados del Lías Inferior. En general se trata de lutitas verdes y grises con intercalaciones de láminas y capas muy finas de dolomías blanco amarillentas con laminación paralela y porosidad móldica. Dado lo reducido del afloramiento y la tectonización de los sedimentos aflorantes es difícil establecer ni tan siquiera una pequeña serie representativa, únicamente indicar que parecen estructurarse en una secuencia carbonato creciente. Al conjunto de estos sedimentos se les atribuye una edad Trías Superior (Carniense y/o más moderno), aunque en concreto estos depósitos dada su posición estratigráfica tan cercana a las dolomías del Lías podrían ya corresponder al transito Triásico-Jurásico. 2.1.1.2. Dolomías grises y amarillentas (2). Jurásico Inferior (Hettangiense-Sinemuriense) De manera análoga a la unidad litológica descrita con anterioridad, estos materiales solo afloran en el borde norte de la sierra de Manzanete y con muy reducida extensión. Su contacto, con las calizas oolíticas superiores, es concordante. Se trata de dolomías grises y amarillentas de masivas a estratificadas en bancos que intercalan láminas de margas hacia techo. En los escasos aflora- mientos donde el depósito no tiene una fuerte dolomitización, se observan laminación con colores alternantes gris-amarillo posiblemente de origen biogénico (mallas de algas). Localmente muestran textura brechoide que se explica por la disolución de niveles salinos (sulfatos y otras sales) interca- lados en esta serie. Se trataría de depósitos de plataforma somera de dominio mareal en medios intra a supramareales. Por criterios regionales se les atribuye una edad Hettangiense-Sinemuriense. 2.1.1.3. Calizas oolíticas (3). Jurásico Inferior (Sinemuriense-Pliensbachiense) Afloran exclusivamente en la sierra de Manzanete con una mayor extensión que los términos anteriores. La litología dominante es de “grainstone” oolíticas y de “grainstone” y “packestone” oo- líticas con peloides, fragmentos de bioclastos y granos de cuarzo, que intercalan capas de micritas, “mudstone” y “wackestone” peletiferas. Estos depósitos carbonatados, con un espesor próximo a los 50 m, en la sierra de Manzanete y de más de 100 m en Sierra Espuña, se organizan en secuencias estrato y grano decrecientes (muddy secuences) desde “rudstone” y/o “grainstone” oolíticas con estratificación cruzada plana como ter- mino basal a “mudstone” con birdeseyes como termino superior. Hacia techo de la serie, en algunos afloramientos, se ha observado una capa caliza con bivalvos pelágicos y estructuras “hummock cross bedding” (H.C.S). Se trataría de depósitos de barras calcareníticas que se desarrollan en plataforma abierta de alta energía, limitando hacia continente zonas de plataforma con baja energía donde se depositan las facies micríticas. En S. Espuña son frecuentes las intercalaciones de “grainstone” oobioclásticas, con espesores decimétricos y estructuras H.C.S.; lo que indica que, en la plataforma descrita, las tempestades, eran un elemento importante de redistribución de los depósitos. La microfacies contenida en estos sedimentos carbonatados es de bivalvos, espículas de espon- ja y radiolarios. SEYFRIED (1979) las data como Sinemurienses-Pliesbachienses. NIETO (1997,