MAGNA 3.0-E. 1:50.000. FOZ (009)

74 miento del zócalo varisco (VIDAL ROMANÍ, 1983). Esta circunstancia dio lugar a un descenso en el nivel de base de la red fluvial que, a su vez, provoca el encajamiento de la red en la Superficie Fundamental (NONN, 1966). Por otra parte, el Macizo Ibérico estuvo sometido a una variación climática hacia condiciones más estacionales, con estación húmeda y seca, que comenzaron a degradar la cobertera vegetal y el espesomanto de meteorización que cubría. En estas circunstan- cias, el manto de meteorización asociado a la Superficie Fundamental, comenzó a erosionarse dejando al descubierto la superficie del frente de meteorización basal (Superficie de erosión S400 del Mapa Geomorfológico). En la zona de estudio, esta superficie se conserva en la cuenca del Río Rigueira, en el cuadrante noroeste de la Hoja. En el Neógeno se produce otro pulso en el levantamiento en el entorno de la Cordillera Cantábrico- Pirenaica que origina otro encajamiento de la red fluvial del área de estudio. Este pulso es seguido por una significativa etapa de estabilidad tectónica que permite desarrollar una amplia superficie con una red fluvial madura encajada en la Superficie de erosión S600-400 del Mapa Geomor- fológico. En la zona de estudio esta superficie se conserva muy degradada en la cabecera de la cuen- ca del Río Centiño y en los relieves residuales que orlan el alveolo de alteración de Ferreira. A partir del Plioceno, una fuerte epirogénesis (CABRAL, 1995) y un cambio radical en las condiciones climáticas, caracterizado por la aparición de las etapas glaciares pliocuaternarias (PENCK y BRÜKNER, 1901-1909), dieron lugar a un avance general de la línea de costa varios kilómetros al norte de su posición actual. Como consecuencia de este fenómeno, la plataforma de abrasiónmarina precuater- naria quedó elevada por encima del nivel del mar, lo que dio lugar a la aparición de la rasa costera. A lo largo del Cuaternario, la sucesión de etapas glaciares separadas por otras interglaciares de clima más templado (PENCK y BRÜKNER, 1901-1909) provocó importantes oscilaciones gla- cioeustáticas (PEÓN y FLOR, 1993) con varios avances y retrocesos de la línea de costa. El avance y retroceso de la línea de costa tuvo lugar varias veces a lo largo del Cuaternario, provocando distin- tas rasas a diferentes niveles. En las etapas con una línea de costa más retirada que la actual la red de drenaje se encajaba, originando valles fluviales que disectaron la rasa costera. En el interior, el encajamiento de la red fluvial provocó la degradación de la S200 y el comienzo del vaciado del manto de meteorización del alveolo de Ferreira. En la última etapa glaciar las condiciones periglaciares que afectaban a la zona de estudio origina- ron abundantes formaciones de ladera como coluviones, derrubios o flujos ( debris flows ) y en las zonas deprimidas y mal drenadas la escasa vegetación existente llegó a formar turberas. Finalmente, en el Holoceno las temperaturas fueron aumentando hasta alcanzar las actuales con- diciones climáticas lo que produjo un nuevo avance de la línea de costa desde la última etapa gla- ciar hasta la posición actual. 7. GEOLOGÍA ECONÓMICA Existen numerosas explotaciones de distinta entidad en la hoja (FERRERO ARIAS et al ., 2010), des- tacando las explotaciones de rocas ígneas, bien para áridos o como materiales de construcción, siendo las principales explotaciones las de Burela (leucogranito de San Ciprián), y Alfoz (Granito de La Tojiza). Explotaciones de gran interés económico son las de caolín, originado por la altera- ción de felsitas, principalmente en las inmediaciones del Río d'Ouro. Otros yacimientos de caolín importantes están relacionados con la alteración del leucogranito de San Ciprián, en la zona de Burela, así como numerosos yacimientos asociados a procesos de removilización y concentración del caolín en depósitos cuaternarios.

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