MAGNA 3.0-E. 1:50.000. FOZ (009)

flujos de material parcialmente fundido, y de baja viscosidad. Estos flujos son subhorizontales, y están en el origen del cizallamiento relativo entre el material viscoso y la unidad, más rígida, su- prayacente, como es el caso de la cizalla extensional inferior. Pero a menudo tienen cierta com- ponente vertical, cuando encuentran la manera de ascender en la corteza, y entonces dan lugar a domos gneísicos (TIREL et al. , 2004; WHITNEY et al ., 2004). 3.2.3. Tercera fase (D3) Con la tercera fase de deformación se asocian pliegues apretados de plano axial vertical y zonas de cizalla dúctil transcurrentes en la vecina Zona Centroibérica (Martínez Catalán et al. , 2004b). En la Zona Asturoccidental-leonesa, también se han identificado pliegues de esta fase, sobre todo menores, y clivajes de crenulación S asociados (Bastida y Pulgar, 1978; Pulgar, 1980), pe- 3 ro los pliegues mayores son escasos y están claramente subordinados a los D1, dominantes. En la mitad occidental de la Zona Asturoccidental-leonesa existen dos grandes pliegues de pla- no axial vertical, el Domo de Lugo y el Sinforme de Bretoña (Fig. 4), que tradicionalmente se han considerado representantes de la tercera fase (Martínez Catalán et al. , 1990). Sin embargo, el domo parece una estructura ligada al colapso extensional o gravitatorio de la cuña orogénica, aunque de desarrollo tardío respecto a él, y el sinforme es una simple consecuencia geométrica del levantamiento del domo. Las trazas axiales de ambos pliegues no entran en la Hoja de Foz, pero pasan muy cerca de sus límites (Fig. 3), por lo que todo el mapa cae dentro del flanco común a ambos, caracterizado por un buzamiento generalizado hacia el Este. Esto explica el basculamiento de los pliegues D1 de Foz y Nois, y la inclinación al Este del cabalgamiento basal. Pese a tener su origen en el colapso de la corteza orogénica engrosada, ambos pliegues han su- frido algo de acortamiento en dirección E-O, comomuestra el desarrollo local de pliegues meno- res y crenulaciones. Pliegues menores subverticales son comunes en algunos afloramientos de migmatitas de la Serie de Vilalba en el Norte de la ventana tectónica del Xistral, precisamente allí donde el Domo de Lugo es un antiforme más apretado (Fig. 4, sección A-A'). A menudo tienen una geometría angular, y pueden presentarse en dos sistemas conjugados con buzamientos me- dios a bajos. También son frecuentes pliegues y crenulaciones asociadas en los niveles de piza- rras del sinforme de Bretoña, y pueden verse algunos ejemplos en el corte de la costa de la playa de Benquerencia, al Este de la Hoja. Se trata de pliegues angulares cuyo plano axial buza al Este unos 40º. No obstante, las estructuras menores de tercera fase son escasas en la Hoja de Foz. 3.2.4. Deformación tardivarisca Las estructuras menores relacionadas con las etapas tardías de la actividad varisca incluyen plie- gues retrovergentes por lo general de tipo kink bands , de bajo buzamiento, y algunas defleccio- nes de la fábrica planar a lo largo de objetos tales como venas o fracturas (estructuras de tipo flanking ; PASSCHIER, 2001), que suministran criterios cinemáticos anómalos que pueden inter- pretarse como resultado de un cizallamiento tardío y débil hacia el Oeste. Pero las estructuras más importantes son dos sistemas de fallas de direcciones NO-SE y NE-SO, en las que se reconocen movimientos de desgarre dextros y senestros, respectivamente, tanto por el desplazamiento de contactos en el mapa como con criterios cinemáticos. Los saltos son en general pequeños y suelen tener componentes verticales. Estas fallas corresponden al siste- ma de desgarres tardivariscos que afectaron a la península y al resto del cinturón Varisco al final 38

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