MAGNA 3.0-E. 1:50.000. FOZ (009)

29 5). Se trata de un espectacular tren de pliegues (BASTIDA y PULGAR, 1978; BASTIDA, 1980) de tamaño métrico a decamétrico, con planos axiales que buzan entre 40 y 50º al oeste y ejes nor- teados y con débil inmersión al norte. En áreas más meridionales de la ventana tectónica del Xistral se han identificado pliegues mayores, pero su flanco inverso nunca excede los 2 km. La geometría de los pliegues en Burela es angular, como corresponde a una alternancia de capas competentes de espesor regular, las cuarcitas, y capas incompetentes pizarrosas más finas que actúan como lubricante (RAMSAY, 1974; RAMSAY y HUBER, 1987). La vergencia es al este, y los flancos están sistemáticamente boudinados. 3.1.2. Cabalgamiento basal del Manto deMondoñedo Una importante falla de bajo buzamiento aflora en playa de Areoura (MARTÍNEZ CATALÁN, 1985), desde donde atraviesa la Hoja en dirección SO hasta el norte de Ferreira, donde es inte- rrumpida por los granitoides variscos. En la mayor parte de su recorrido está cubierta por los se- dimentos cuaternarios del valle del RíoMoucide, que es una expresión morfológica del acciden- te. La falla buza al este unos 20º, y estructuras S-C en la playa de Areoura suministran criterios cinemáticos que indican un movimiento de bloque superior al este, es decir, aparentemente correspondientes a una falla normal. Sin embargo, la falla se interpreta como un cabalgamiento por el salto estratigráfico y, sobre todo, por el salto metamórfico a ambos lados de la misma. En efecto, la falla separa el Neoproterozoico de la Serie de Vilalba, en el bloque superior, de la Cuarcita del Xistral en el infe- rior, es decir, superpone sedimentos más antiguos sobre los más modernos. Sin embargo, este criterio no es totalmente seguro, dado que antes de la falla existían grandes flancos inversos, por lo que las relaciones estratigráficas podrían explicarse con los pliegues tumbados, aunque la falla fuera normal. El criterio del salto metamórfico es, en cambio, fiable, pues la falla superpo- ne la zona de la sillimanita-ortosa, en el bloque superior, sobre la zona de la clorita-biotita en el inferior (ver capítulo 4; ARENAS y MARTÍNEZ CATALÁN, 2003). Por tanto, es claro que ambos bloques están separados por un cabalgamiento, probablemente la falla actual. Otra posibilidad es que la falla actual sea normal, pero en ese caso representaría un rejuego del cabalgamiento o una falla posterior superpuesta al mismo. Una vez establecido su carácter, resulta claro que la falla tiene encima el Manto de Mondoñedo, tal como lo describióMATTE (1968a), por lo que debe tratarse de su cabalgamiento basal, y su prolon- gación hacia el este debe unirse al cabalgamiento frontal del manto, cartografiado por MARCOS (1973) en la región de Los Oscos (Fig. 4, sección B-B'). En la Hoja de Foz, por lo tanto, lo que aflora es la base del manto en sus partes internas, debido a la formación tardía del Domo de Lugo (CAPDEVILA, 1969), y el bloque inferior de la falla forma parte de la ventana tectónica del Xistral. El cabalgamiento lleva asociada una zona de cizalla dúctil, que fue identificada y descrita por BASTIDA y PULGAR (1978) en la costa de Foz, y posteriormente, fue cartografiada en todo el Domo de Lugo (Fig. 3) por MARTÍNEZ CATALÁN (1985), por encima del cabalgamiento basal. Los mejores afloramientos de la zona de cizalla están en la sección costera de la Hoja de Foz, en- tre la playa de Areoura y la Ría de Foz, donde alcanza 3,5 km de espesor (Figs. 3 y 4). Se caracte- riza por el desarrollo generalizado de una fábrica de forma planolinear, cuya componente pla- nar varía desde un clivaje de crenulación a una nueva esquistosidad (S ) en las rocas pelíticas, y 2 una foliación milonítica en las cuarcitas (BASTIDA y PULGAR, 1978; ALLER y BASTIDA, 1993). La nueva fábrica incluye también una lineación mineral de dirección aproximada E-O. Además, son frecuentes las estructuras de tipo S-C, sobre todo hacia la base del manto, y los pliegues me-