MAGNA 3.0-E. 1:50.000. CALASPARRA (890)

42 Al igual que en el caso del conjunto anterior, su depósito se efectuaría dentro de un ambiente de plataforma somera, cercano a la línea de costa, con frecuente desarrollo de barras y even- tual llegada de depósitos deltaicos. 2.3.2.5. Lutitas rojas y grises de aspecto caótico, con yesos y brechas (45). Langhiense- Tortoniense inferior Se trata de una unidad de difícil identificación ante la extrema semejanza de sus aflora- mientos con los de la Facies Keuper, resultando prácticamente imposible su reconocimiento en ausencia de cortes. La semejanza entre ambos conjuntos deriva, por una parte, de que el presente conjunto está constituido en su práctica totalidad por materiales triásicos rese- dimentados y, por otra, de que la Facies Keuper muestra un aspecto muy desordenado en la región debido a su plasticidad y a la fuerte deformación sufrida, sin olvidar los efectos que puedan haber producido los procesos secundarios que han afectado a los yesos que alberga. Un excelente punto de observación del presente conjunto se encuentra en los taludes del PK 353,5 de la carretera nacional N-301 (Madrid-Cartagena), dentro de la vecina Hoja de Cieza (891), donde se manifiesta como depósitos triásicos resedimentados y organizados en forma de flujos en masa estratificados. GARCÍA CORTÉS et al . (1991), tras una revisión de los afloramientos triásicos en este sector y en otros de las zonas orientales de la Cordillera Bética, ponen de manifiesto el carácter sedimentario, caótico y discordante de estos depó- sitos de apariencia triásica, cuestionando el carácter alóctono y el tipo de estructuración que de forma tradicional se les ha atribuido. Para ello se basan en el estudio micropaleon- tológico de numerosas muestras, que sugiere su sedimentación durante el Mioceno Medio. En los afloramientos descritos de Cieza no se han encontrado argumentos paleontológicos que permitan precisiones cronológicas, pero los rasgos sedimentarios respaldan la interpre- tación señalada. Dentro de la Hoja de Calasparra, esta unidad tan sólo se ha reconocido con certeza en al- gunos barrancos del sector de la casa del Pino, sin que deba descartarse que en realidad una parte de los afloramientos asignados al Triásico al O de la sierra del Almorchón, puedan corresponder a ella. Su aspecto es el de una brecha caótica, con bloques y cantos subangulosos de procedencia triásica, englobados en una matriz areno-arcillosa de colores rojizos y ocres. Se apoya dis- cordantemente sobre la Facies Keuper y bajo depósitos cuaternarios. Su espesor visible se aproxima a 10 m. En otros lugares este tipo de materiales han sido asignados al Langhiense-Serravalliense me- dio (GARCÍA CORTÉS et al ., 1991). Son depósitos desordenados de derrubios y fango, que en algunas zonas se encuentran relacionados con resedimentaciones del nivel de despegue de los mantos subbéticos; no obstante, es posible que en otras áreas se trate del producto del desmantelamiento subaéreo o subacuático de afloramientos de materiales triásicos, en cuyo caso podrían ser más modernos.