MAGNA 3.0-E. 1:50.000. Ontinyent (820)

47 En relación a las fases de deformación comentadas se produce una intensa erosión en los flancos de los pliegues. Esto es especialmente visible al sur del Alto de Soterrani, donde la base detrítica conglomerática de las calizas erosiona totalmente a los materiales calcá- reo-margosos del Cretácico Superior y a parte del techo de la formación dolomítica. 3.5.3. Burdigaliense superior-Langhiense Esta fase se caracteriza por el plegamiento coaxial de las estructuras anteriormente formadas. Este apretamiento fue acompañado, en ocasiones, por el emplazamiento de unidades gravi- tatorias en el límite entre el Prebético externo e interno. Los cabalgamientos anteriormente citados, involucran a los carbonatos de plataforma del Cretácico Superior, Eoceno y Oligoceno, que aparecen en escamas imbricadas, cuya suela se sitúa en muchas ocasiones en las margas del Tap basal Langhiense. Esto es bien patente en la zona de Pla Giner, donde se observan una serie de cabalgamientos en cuyo bloque superior se encuentran los carbonatos y margas del Cretácico Superior y, ocasionalmente, las dolomías del Cretácico Medio, situándose en bloque inferior las margas y turbiditas langhienses, formando un sinclinal vergente al norte. En la tesis de De Ruig (1992) aparece un tensor de esfuerzos cal- culado en la Sª de La Solana, indicativo de una compresión N5ºO con s 3 en posición subvertical. 3.5.4. Serravalliense-Tortoniense inferior Al final del Langhiense, el Prebético de Alicante, según De Ruig ( op. cit. ), se encuentra some- tido progresivamente a un régimen transpresivo dextral. Se produce una rotación antihoraria de la dirección de máximo acortamiento de NNO-SSE a ONO-ESE. Esto produce el rejuego en desgarre dextral de numerosas fallas de dirección N70ºE a N100ºE que frecuentemente limitan cuencas rómbicas. Existe, en relación a esta fase, una segunda familia de estilolitos que cortan a los estilolitos anteriores. Las estructuras más características de esta fase en la Hoja se sitúan al sur de Sierra Mariola. Concretamente los sistemas de cabalgamientos de Pla Giner, donde la serie del Cretácico Inferior cabalga al Tap langhiense, según planos ENE, parece que podrían corresponder a esta fase. Como ya se ha comentado, esta fase de deformación origina una surrección del relieve que comporta la erosión parcial o total del Cretácico Superior. 3.5.5. Tortoniense superior-Messiniense Esta fase considerada como neotectónica, coincide con la finalización del plegamiento en la zona Prebética y, simultáneamente, marca el inicio de la sedimentación continental (De Ruig, 1992). El evento tectónico más característico de esta fase es la formación de fallas extensio- nales que responden a un acortamiento según N-S a NNE-SSO. Algunas de las fallas normales N-S presentes en Sierra Mariola podrían relacionarse o haberse reactivado con esta fase.