MAGNA 3.0-E. 1:50.000. GRADO (028)

90 los cursos fluviales con esta morfología valores moderados para el tamaño dominante del sedimento, la carga y también para la sinuosidad, estabilidad y gradiente del canal. Se les asigna una edad Holoceno, por ser depósitos con numerosas evidencias de actividad reciente. Los cursos fluviales que presentan depósitos de terraza asociados son los ríos Nalón, Narcea, Aranguín, Cubia y Nora. Estos depósitos consisten principalmente en gravas redondeadas con matriz areno-limosa; con frecuencia, existen intercalaciones de niveles de arenas y limos arcillosos. La naturaleza de los materiales es mayoritariamente silícea. Se han identificado seis niveles de terraza (T 1 a T 6 ). La terraza T 1 se dispone entre los + 0-5 m, la terraza T 2 entre los + 0-20 m, la terraza T 3 entre los + 10-40 m, la terraza T 4 entre los 40-70 m, la terraza T 5 entre los + 70-90 m y la terraza T 6 entre los + 100-130 m. Algunos de estos niveles de terraza se han agrupado (T 2-3 , T 3-4 , T 2-4 y T 4-5 ), ya que numerosos depósitos presentan superficies de colmatación degradadas y bordes de terraza poco netos o enmascarados por depósitos de ladera. Como ya se indicó en el capítulo 2, en el depósito de terraza de Trasquirós (Candamo) (T 3-4 ) fue hallada industria lítica del Achelense final (Hernández Pacheco, 1919), lo cual permite asignar una edad mínima de 100 000 años al nivel de terraza T 3 , y atribuir los niveles T 1 y T 2 al Pleistoceno superior, y los niveles T 3 , T 4 , T 5 y T 6 al Pleistoceno medio-inferior. Los bordes de terraza son, en la mayor parte de los casos, poco netos y, a su vez, los bordes superiores se encuentran con frecuencia enmascarados por depósitos de ladera. Los rellanos fluviales son pequeñas superficies de topografía suave y subhorizontal limita- das por cambios bruscos de pendiente con escasos metros de desnivel; en la Hoja, no se han observado sobre estas formas depósitos fluviales. Los rellanos han sido interpretados como restos degradados de terrazas fluviales erosivas. Esta interpretación se basa en que sus características litológicas no indican un origen relacionado con erosión diferencial, y en que existe, además, una relación cartográfica con otras hom- breras o formas de claro origen fluvial; esta relación consiste en que las formas relacionadas definen bandas relativamente estrechas, alargadas, próximas a cursos fluviales actuales y con una pendiente similar a la de estos. 4.2.2.4. Formas de meteorización química Las dolinas que aparecen en esta Hoja son depresiones con un fondo plano o en embudo, y de planta más o menos circular, originadas por procesos de meteorización kárstica. Se han desarrollado sobre las litologías calcáreas del Gp. Rañeces y de las formaciones Moniello, Candás, Alba y Barcaliente. El fondo de las dolinas puede estar tapizado por depósitos de ladera procedente de sus bor- des, por depósitos de descalcificación o por rellenos de depósitos mixtos .