MAGNA 3.0-E. 1:50.000. GRADO (028)

76 En el flanco normal del antiforme la sucesión cambro-ordovícica aparece repetida a con- secuencia de la existencia de cabalgamientos cuyo nivel de despegue se sitúa en la Fm Láncara. Por el contrario, los cabalgamientos presentes en el flanco inverso causan la omi- sión de parte de la sucesión estratigráfica y el adelgazamiento de dicho flanco (Alonso y Marcos, 1992). Según estos mismos autores, dichos cabalgamientos están genéticamente relacionados con el desarrollo de este antiforme, que se interpretaría como un pliegue de propagación de falla (Fig. 29). Los cabalgamientos de Peñaflor y Granda, y cabalgamientos asociados El Cabalgamiento de Peñaflor (Rodríguez Fernández, 1977, 1978) discurre por el flanco occi- dental del Antiforme del Pedroso, situándose en la base de la Fm Láncara durante gran parte de su trazado (Fig. 28). En el bloque cabalgado, la superficie de cabalgamiento es oblicua a la estratificación, excepto en la parte central de la culminación del Antiforme del Pedroso, donde se reduce a un despegue de la Fm Láncara sobre la Fm La Herrería (Alonso y Marcos, 1992). Desde esta culminación, el cabalgamiento asciende en la sucesión estratigráfica. La prolonga- ción del cabalgamiento al sur de los afloramientos terciarios de Grado es problemática, ya que no afloran rocas anteriores al Devónico. El Cabalgamiento de Granda se sitúa en el flanco inverso del Antiforme del Pedroso y discurre paralelamente al Cabalgamiento de Peñaflor durante gran parte de su trazado, confluyendo con él hacia el sur. Se dispone oblicuo a la estratificación tanto en el bloque cabalgante como en el cabalgado. En el bloque cabalgante, desde la culminación del Anti- forme del Pedroso (culminación del río Soto) hacia el nordeste, este cabalgamiento asciende en la sucesión estratigráfica desde la Fm La Herrería hasta la Fm Furada, y causa la omisión de parte de la sucesión estratigráfica en el flanco inverso del antiforme. Asociados a este cabalgamiento existen otros cabalgamientos menores que consisten en fallas inclinadas en el mismo sentido que la sucesión estratigráfica pero con menor ángulo de buzamiento que ella. Sus trazados son difíciles de determinar con precisión debido a la mala calidad de los afloramientos. El Cabalgamiento de Rubiano En la Hoja de Proaza, al sur de la Hoja de Grado, el Cabalgamiento de Tameza pone en con- tacto formaciones cámbricas sobre rocas del Carbonífero. El desplazamiento y la separación estratigráfica asociados a esta importante estructura disminuyen progresivamente hacia el norte (Bastida y Castro, 1988). Este hecho, junto con el desarrollo de estructuras de acortamiento alpi- nas, dificulta la identificación de su prolongación dentro de la Hoja, que muy probablemente co- rresponde al Cabalgamiento de Rubiano, el cual pone en contacto la Fm Barcaliente, en el bloque cabalgante, con las formaciones Valdeteja y San Emiliano, en el bloque cabalgado. En el bloque cabalgante, la sucesión devónica y carbonífera forma un anticlinal vergente hacia el este, en cuyo núcleo afloran rocas de las formaciones Naranco y Moniello, y del Gp. Rañeces. Este anticlinal apa- rece truncado por fallas inversas alpinas que conectan con la Falla de Llanera. Hacia el nordeste, el Cabalgamiento de Rubiano fue reactivado durante la compresión Alpina y aparece cobijando los depósitos cenozoicos del borde occidental de la cuenca terciaria de Oviedo.